EL PODER ESTÁ EN LA ACTITUD…
- Pocos ricos y poderosos sobresalen por su talento, encanto o belleza: son ricos y poderosos porque se propusieron ser ricos y poderosos.
- Quien navega sin una meta nunca llega al puerto deseado. Una meta ambiciosa debe estar por encima de tus posibilidades. Desarrolla una indiferencia absoluta ante las limitaciones que imponen tus capacidades. Cualquier cosa que la mente humana puede imaginar, se puede conseguir.
- No seas esclavo de los títulos. Los más listos del colegio o la universidad casi nunca son los que más éxitos consiguen. Los “empollones” consiguen trabajos acordes con sus calificaciones (el pasado), no con sus deseos de triunfar (el futuro).
- No tengas miedo a los errores, los intentos fallidos son una condición ineludible del éxito. Quien da el paso al frente cuando el árbitro pita un penalti y dice “lo tiro yo” es obvio que puede fallarlo, pero el que agacha la cabeza y se esconde jamás meterá gol. Simplemente aprende de los fracasos. Samuel Beckett dijo: “Equivócate, equivócate otra vez, pero equivócate mejor”; y Winston Churchill dijo: “El éxito consiste en ir de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo”.
Mientras haya un objetivo no existen límites para lograr el éxito.
… Y TAMBIÉN EN EL EQUIPO
Esto lo dijo Mark Twain: “Aléjate de aquellas personas que traten de despreciar tus ambiciones. Las personas mezquinas siempre lo hacen, pero las verdaderamente grandes te hacen sentir que tú también puedes llegar a ser grande”.